En mis pantalones apretados, me puse tan caliente que me corrí dos veces

Estoy acostado en la cama mirando porno en mi teléfono. Te digo lo que pasa con el porno, un blanco en el baño chupando una gran polla negra. Yo comienzo a emocionarme, y te pregunta si quieres unirte a jugar con los pellizcos, sentir las pollas del otro, lamiendo y chupando. Entonces es el momento de quitarnos la ropa interior para que nos comamos los agujeros, y tienes que decidir si quieres que te folle primero o viceversa. Un par de minutos después de disparar mi primera carga, me di cuenta de que me puso tan caliente que todavía estoy cachonda, así que cambio la iluminación y la posición y hago otra carga gruesa y cremosa para usted de cerca de la cámara.